Nuestras tintas termosensibles reversibles tienen la peculiaridad de cambiar de color con el aumento de la temperatura. Con un poco de imaginación, estas tintas pueden ofrecer un espectro de posibilidades impresionante en el campo del marketing de empresa.
Su aplicación principal es desvelar mensajes ocultos, de manera que al alcanzarse una determinada temperatura, el usuario del producto pueda leer algo, descubrir un premio, ver un logotipo o símbolo.
En el caso de la cerveza Coors, no es exactamente esto ya que, sin necesidad de imprimir ningún texto adicional, todo el mundo que conoce la cerveza asocia el cambio de color a frío. La etiqueta de la cerveza Coors Light lleva unas montañas con ribetes plateados.
MONTAÑAS BLANCAS = CERVEZA CALIENTE
MONTAÑAS AZULES = CERVEZA FRÍA
La combinación de tintas convencional-termosensible hace que un cambio de color de blanco a azul en las montañas de su distintivo – tras enfriar la botella en el refrigerador - indique que la cerveza está a su temperatura idónea de consumo. Nadie tiene duda. Montañas azules igual a cerveza al punto. La tinta termosensible, en este caso, está calibrada a 8ºC (46ºF). Estas tintas permiten su calibración a cualquier temperatura entre -10ºC a +69ºC, basta con saber a qué temperatura queremos el cambio de color para que nuestro departamento de producción calibre la tinta a la temperatura idónea para el cambio.
El cambio de color es reversible: imagina que sacas la cerveza de la nevera y te llaman al teléfono. La cerveza va calentándose y las montañas vuelven a quedar blancas. Normalmente tocamos el envase para comprobar la temperatura, pero esto es muy poco fiable porque el líquido del interior puede estar más caliente de lo que pensamos. La tinta se calibra a la temperatura idónea en conjunción con la temperatura del interior, no del exterior.
Tintas Interactivas
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