La esterilización de vidrio es un proceso que afecta a distintos tipos de envases como botellas, biberones, fiambreras, bandejas y similares. En todos los casos, resulta imprescindible llevarlo a cabo siguiendo unas pautas que están destinadas a garantizar el mejor resultado posible.
Es imperativo controlar la temperatura en estos procesos, para asegurar que se cumple con la normativa. Las etiquetas de temperatura son una opción económica y fiable para este cometido.
¿Cómo llevar a cabo la esterilización de material de vidrio?
Dependerá del tipo de objeto a esterilizar. En la siguiente clasificación, te comentamos las características de cada tipo de esterilización.
Esterilización de material de laboratorio de vidrio
Los tubos, los frascos y demás material se suele sellar con un algodón graso sobre el que se coloca un papel impermeable. Para la esterilización se suele usar:
- El calor seco. Deberás exponer el material directamente al fuego, evitando que supere los 100 ºC.
- El calor húmedo. Es habitual el uso de agua a 100 ºC durante un máximo de 10 minutos.
- El vapor. La temperatura idónea es de 121 ºC durante unos 15 minutos.
Esterilización de recipientes de uso alimentario de vidrio
Lo habitual es introducirlos en agua hirviendo a 100 ºC y dejarlos durante 10 minutos. Posteriormente, procede a su correcto secado y podrás usarlos con total seguridad.
Las etiquetas de temperatura en la esterilización de vidrio
A la hora de usar recipientes de vidrio en el laboratorio o en un negocio de hostelería, la normativa obliga a esterilizarlos de manera eficaz. De no hacerlo, podríamos exponer a los pacientes o los clientes del local en cuestión a graves consecuencias para su estado de salud.
Debemos subrayar que la posibilidad de dejar un envase en agua hirviendo durante más tiempo del correspondiente podría llegar a provocar su rotura. Además, no siempre se conoce cuál es la temperatura exacta del agua a menos que contemos con algún tipo de ayuda.
Las etiquetas de temperatura, en este caso, son una buena solución, pues se adhieren al envase fácilmente, ya que soportan la humedad y el calor. Al estar pegadas al envase de vidrio nos garantizan que la temperatura indicada es la que ha recibido el recipiente. Disponen de un sensor de temperatura que cambia de color de forma permanente al alcanzar la temperatura marcada. Esto permite asegurar que se ha alcanzado la temperatura exacta para conseguir que la esterilización ha sido correcta.
Estos indicadores de temperatura son un método eficaz para el control de calidad de la esterilización de material de vidrio.
Existen etiquetas en el mercado que tienen capacidad para medir temperaturas en un amplio rango, por lo que también se pueden usar para esterilizar otros materiales como el plástico.
Indicadores de temperatura recomendados para control de esterilización de vidrio
La esterilización ayuda a la reutilización constante de los recipientes y, sobre todo, a poder seguir almacenando todo tipo de comidas o bebidas en su interior. Su utilidad es indudable para evitar la contaminación por contacto y para proteger mejor los alimentos a conservar.
Hay que remarcar que es de vital importancia que el secado del envase sea perfecto, pues un poco de agua puede convertirse en el hábitat perfecto para los microorganismos. Si vas a preparar algún tipo de mermelada o similar, tendrás que repetir el proceso con el bote bien cerrado para esterilizar el exterior del recipiente.
La esterilización de vidrio es, por lo tanto, una obligación para garantizar la salubridad de los alimentos que se almacenen en cualquier tipo de envases. Aconsejamos siempre confiar en las etiquetas de temperatura para convertir el proceso en uno mucho más fiable que termine convirtiéndose en la mejor garantía de éxito.